El miércoles 10 de agosto por la tarde, el periodista Gerardo Delgado fue asesinado de varios disparos por sicarios en el trayecto Manta-Montecristi, a unos 400 kilómetros de Quito, cuando se dirigía a cubrir la noticia de un supuesto suicidio, por el cual había recibido una llamada de aviso horas antes. La Policía Nacional anunció que detuvo a dos personas por el hecho, y según se informa en medios locales, uno de los aprehendidos habría asegurado que le pagaron por el crimen y que desconoce quién lo contrató y los motivos por los cuales querían muerto al comunicador.
Gerardo Delgado era director del medio digital local Ola Manta TV y era muy reconocido y respetado por lxs habitantes de la zona por su trabajo periodístico. Por sus reportes acerca de las necesidades y la realidad de la ciudadanía de Manta había ganado gran popularidad, por lo cual una semana atrás había anunciado sus intenciones de ser candidato a concejal, apoyado por el movimiento Revolución Ciudadana.
A pesar de no haber denuncias de amenazas previas, es indispensable que se realice una investigación que tenga en cuenta el trabajo periodístico de Delgado como posible motivación para el crimen. Lxs trabajadorxs de la prensa comunitaria son lxs más expuestxs a los riesgos de informar sobre temas como corrupción, narcotráfico y delincuencia en sus localidades, por lo cual se debe indagar en profundidad hasta dar con los autores intelectuales de su asesinato. Desde la Federación Internacional de Periodistas nos solidarizamos con la familia del periodista y en particular con su hija, que fue testigo de lo sucedido, y exigimos que las autoridades actúen con celeridad para esclarecer los motivos de su crimen y capturar a todos los responsables.