México: se cumplen dos años del inicio de la huelga de Notimex

En un contexto de creciente violencia contra periodistas, se cumplen dos años del inicio de la huelga y acampe de lxs trabajadorxs de Notimex, quienes llevan adelante un reclamo por los despidos de 245 personas a principios de 2020, de las cuales el 80% eran mujeres. Este reclamo, que se perpetúa hasta el día de hoy por la falta de compromiso político para resolverse, está encabezado por el Sindicato Único de Trabajadorxs de Notimex (SutNotimex) y fue acompañado por gran parte del arco sindical nacional y regional. En estos 24 meses de conflicto, la directora de Notimex, Sanjuana Martínez, lejos de intentar encontrar una solución, apostó por desprestigiar a la organización de lxs trabajadorxs y a su secretaria general, Adriana Urrea. Una investigación conducida por el sindicato con la colaboración de organizaciones internacionales, develó que existen elementos para sospechar del uso de fondos de la agencia para impulsar campañas en redes sociales para intentar horadar la lucha de lxs periodistas despedidxs. También se iniciaron causas judiciales contra Urrea, que han sido desestimadas por la justicia. Alrededor de 80 trabajadorxs tienen sentencias favorables para ser reincorporadxs a sus puestos de trabajo, pero esos fallos han sido ignorados por la conducción de la agencia y el gobierno federal, que a pesar de haber tenido gestos de conciliación, no ha intervenido hasta ahora a favor de lxs despedidxs. Esta actitud favorece la posición del organismo en detrimento de los derechos laborales de las personas que fueron injustamente expulsadas. El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), organización afiliada a la FIP que acompaña al SutNotimex desde el comienzo del conflicto, emitió un comunicado en el que “exige al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador la solución inmediata, apegada los estándares internacionales en materia de derechos humanos laborales, de la huelga en la agencia de noticias del Estado mexicano Notimex, que este día cumple dos años de haber sido estallada por las y los trabajadores de la misma, en defensa de sus garantías de trabajo y de respeto a su convenio laboral”. También condenan “que el gobierno federal, representado por el presidente López Obrador, quien llegó al gobierno diciéndose aliado de los trabajadores, este prolongando innecesariamente, con gravísimas consecuencias para los sindicalizados y sus familias, la solución de un conflicto laboral, sostenido en el 80 por ciento por mujeres, en el que el Estado mexicano ha violado reiteradamente los principios de huelga, de agremiación y de sindicalización”. La Federación Internacional de Periodistas repudia la falta de respuestas y de voluntad política ante esta situación, que vulnera los derechos laborales de cientos de periodistas. Pero el peligro de este tipo de conflictos no radica únicamente en esa vulneración, sino que también repercute en el contexto más general al que se enfrentan hoy lxs trabajadorxs de prensa en México. A la falta de trabajo y la precarización de las condiciones en las que se desempeñan lxs periodistas, se le suma el peligro concreto que corren las vidas de lxs comunicadorxs mexicanxs, que son víctimas del hostigamiento, las amenazas y la persecución por parte de los grupos del crimen organizado, con el aval (por acción u omisión) de los distintos poderes del Estado. En los escasos 52 días que lleva el 2022, cinco periodistas en actividad han sido asesinados, un ex trabajador de prensa corrió el mismo destino y al menos dos sufrieron atentados contra sus vidas. Estas cifras son producto de casi dos décadas de absoluta impunidad, en las cuales solo el 5% de los crímenes contra comunicadorxs han sido resueltos en la justicia. Este escenario de violencia se ve profundizado por la precariedad y la falta de trabajo, que expone a lxs trabajadorxs de prensa a peores condiciones de seguridad. Por todo esto, hoy México es considerado uno de los países más peligrosos del mundo para el ejercicio del periodismo, en donde están en riesgo no sólo las personas que ejercen la profesión, sino los derechos a la libertad de expresión y a recibir información, lo cual condiciona al sistema democrático. Por todo lo expuesto, es imprescindible que con urgencia se reinstale a lxs trabajadorxs de prensa en Notimex, se respete su representación sindical y cesen el hostigamiento y la persecución. La agencia de noticias debe estar al servicio del pueblo mexicano y para ello se deben respetar los derechos de las personas que en ella trabajan. El Estado debe dar señales urgentes de apoyo a lxs trabajadorxs de prensa de todo el país, que sufren diariamente la violencia en todas sus formas. Un modo de comenzar a hacerlo es siendo garante de los derechos de lxs periodistas que se encuentran bajo su mandato.