El director del semanario El Espectador, Marco Antonio Toledo Jaimes, habría sido secuestrado en su domicilio junto a su esposa Guadalupe Denova Flores y su hijo Alberto Toledo Denova; por cinco individuos armados el domingo 19 de noviembre. Toledo Jaimes habría recibido amenazas por su trabajo periodístico cubriendo política y policiales.
La periodista Nayssa Arce Avilés y su esposo, también comunicador, Alberto Sánchez Juárez, habrían sido secuestrados el miércoles 22 de noviembre por civiles armados, dejando a lxs hjixs menores de la pareja en la vía pública, según denunció en redes sociales Julissa Natzely Arce, hermana de la periodista.
El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP) difundió un comunicado en el que “
exige a las autoridades municipales, estatales y Federal la pronta localización con vida de los trabajadores de los medios de comunicación y de sus familiares. Es urgente que la Fiscalía Especializada de Atención a delitos contra la Libertad de expresión (Feadle), la Fiscalía General del Estado (FGE) y el gobierno de Guerrero coordinen las acciones pertinentes para localizarlos aplicando el protocolo Homologado de delitos contra la Libertad de Expresión”. En el mismo documento, recordó el reciente caso del fotoperiodista
Ismael Villagómez asesinado en su vehículo en un supuesto intento de robo por presuntos pasajeros.
La Federación Internacional de Periodistas acompaña al SNRP en la exigencia a las autoridades de un trabajo coordinado y profundo entre todas las instituciones para que lxs periodistas secuestradxs y sus familiares retornen con vida y demanda que se redoblen esfuerzos por combatir y castigar la violencia contra la prensa desde todos los poderes del Estado. México es uno de los países donde es más riesgoso ejercer la profesión del periodismo en el mundo. Es deber de las autoridades revertir esta realidad y garantizar la libertad de prensa, la libertad de expresión y el acceso a la información de toda la población.