México: un periodista asesinado figura entre los espiados por el programa Pegasus
Entre los 180 trabajadorxs de prensa de todo el mundo espiados con el software israelí se encuentra Cecilio Pineda, periodista freelance que fue asesinado en 2017 en Tierra Caliente, México. La posibilidad de que Pegasus haya facilitado la información necesaria para concretar el crimen debe ser investigada para avanzar en el esclarecimiento del mismo, que al día de hoy se encuentra impune.
Tal como lo reveló una investigación divulgada en las últimas horas, el programa Pegasus, creado por la empresa israelí NSO y vendido a varios gobiernos nacionales y locales, fue utilizado para espiar a más de 180 periodistas de todo el planeta. La administración de Enrique Peña Nieto, que ocupó la presidencia de México entre 2012 y 2018, adquirió este software y lo utilizó para realizar tareas de espionaje sobre más de 15 mil personas, lo cual convirtió al país latinoamericano en el mayor cliente de la compañía.
En la lista de trabajadorxs de prensa que fueron víctimas de espionaje, se encuentra Cecilio Pineda, quien fue asesinado en marzo de 2017 luego de haber recibido numerosas amenazas y de haber intentado ingresar al Mecanismo de Protección para periodistas. Pineda se dedicaba a reportar sobre los vínculos entre la política y el narcotráfico en su región, y horas antes de su asesinato había realizado una transmisión en vivo por Facebook denunciando a la policía y el gobierno local por trabajar con un grupo del crimen organizado.
Uno de los tantos datos a los que se puede acceder con este sistema es la ubicación en tiempo real de los dispositivos móviles, lo cual implica un riesgo a la integridad física de las personas espiadas. El teléfono celular del periodista nunca fue hallado, por lo cual no se pudo peritar ni confirmar que el mismo estuviera efectivamente afectado por el software de espionaje Pegasus. Pero la aparición de su nombre en la lista de personas sobre las cuáles desde México se solicitó seguimiento, levanta la alarma sobre la utilización que se le puede dar a la información recabada tras el espionaje ilegal. Si bien NSO afirma que su programa tiene como objetivo “combatir delitos graves y terrorismo”, la aparición de 26 nombres de periodistas mexicanos y más de 150 en el resto del mundo confirma que su uso puede ayudar a restringir la libertad de expresión, exponiendo a lxs trabajadorxs de prensa a posibles ataques y amenazas.
Desde la Federación Internacional de Periodistas exigimos que se esclarezca el asesinato de Cecilio Pineda y se investigue si la utilización de métodos de espionaje por parte del Estado facilitó la información necesaria para que se concretara el crimen del periodista. La violación a la privacidad y al derecho a reservar las fuentes de lxs trabajadorxs de prensa afectados es un ataque directo a la libertad de expresión, por lo que instamos a las autoridades a que informen los motivos por los cuales se realizaron tareas de vigilancia ilegal y condenen el uso de estos métodos adoptados por la administración anterior.