La Asociación Nacional de Periodistas (ANP) emitió un comunicado tras asistir a Alarcón, en el que detalló que
"la madrugada del sábado 21 de junio de 2025, aproximadamente a la 1:45 a. m., cuando sujetos desconocidos dispararon una ráfaga de balas a su vivienda ubicada en el sector Plataforma de Yurimaguas".
El sindicato indicó que los agentes policiales intervinientes recogieron 13 casquillos de bala como evidencia del ataque a la vivienda del colega.
A su vez, Alarcón relató a la ANP que tuvo amenazas precedentes relacionadas a su trabajo periodístico y a investigaciones sobre autoridades políticas locales:
"El lunes 16 de junio, pasadas las 11 de la noche, recibió a través de WhatsApp un mensaje con expresiones extremadamente violentas y referencias directas a su labor informativa. Se le exigía retirar una publicación crítica difundida días antes, con amenazas explícitas contra su vida y la de sus familiares".
"La ANP recuerda que este año ya han sido asesinados dos comunicadores en el país, en Ica (enero) e Iquitos (mayo). El Estado tiene el deber de garantizar la vida y seguridad del periodista Carlos Alarcón y su familia y debe actuar sin dilaciones", indica el comunicado.
La Federación Internacional de Periodistas se suma a la ANP en el absoluto repudio a este ataque y reclama una pronta investigación que de con los culpables, asi como medidas de protección que garanticen la seguridad, el derecho al trabajo y la libertad de expresión de Alarcón.