La UPAGRA, organización afiliada a la FIP, dio inicio al proceso de negociación del nuevo Convenio Colectivo de lxs trabajadorxs de TeleOnce (WLII-TV) hace más de ocho meses, en julio de 2022. Néstor Soto, secretario ejecutivo de la UPAGRA, se refirió a las condiciones en las que se vienen desarrollando el proceso: "desde el inicio TeleOnce ha dificultado el proceso negándose a asuntos tan básicos como las reglas de negociación, pagar las horas de trabajo de sus empleados mientras participan del Comité Negociador, y hasta resistirse a acordar las secciones y/o artículos del Convenio en los que hay consenso de dejar como están, sin cambios, todo lo cual se suele pactar el primer día de la negociación como actos de buena fe de ambas partes y para agilizar el proceso. Esta actitud continuó en las reuniones subsiguientes".
"En diciembre, aún sin acordar las reglas de negociación, se llegaron a acuerdos tentativos sobre 22 artículos del Convenio, pero en enero y febrero prácticamente no se adelantó nada más porque TeleOnce insiste en eliminar derechos adquiridos y perjudicar la seguridad de empleo de sus trabajadores", afirmó Soto.
Recientemente, en la negociación los representantes de TeleOnce insistieron en demandar que lxs periodistas revelen sus fuentes de información a los supervisores del departamento de noticias de la compañía. "La UPAGRA no había enfrentado esta exigencia en los convenios colectivos que tiene con otros medios noticiosos en Puerto Rico. Por el contrario, la norma general es que se protegen las fuentes de información en la industria periodística", expresó el secretario ejecutivo de la UPAGRA. "La protección de las fuentes confidenciales de información toca directamente la ética y seguridad del trabajo periodístico, y la UPAGRA no tiene interés de modificar el Convenio sobre este asunto. La Unión sigue disponible para continuar negociando, pero no contempla modificar el lenguaje del Convenio sobre este punto excepto que sea para dar mayor protección a los periodistas, nunca para quitárselo ni menoscabarlo", concluyó Néstor Soto.
La Federación Internacional de Periodistas acompaña a su organización afiliada en el rechazo a estas presiones que plantea la patronal, que buscan vulnerar la protección de las fuentes, situación que constituye un ataque a la independencia y la seguridad de lxs periodistas. También repudia la actitud de la empresa, que con su intransigencia demora la negociación por el convenio colectivo y atenta contra los derechos de lxs trabajadorxs.